¡¡¡ Descubriendo la bella mirada de una Mujer de hielo...!!!
Como una ráfaga de viento frío, siempre la vi pasar caminando con prisas como si sus desplazamientos estuvieran ordenados por un rígido horario de salidas y entradas.Nunca supe quien era, si había llegado al Pueblo de otro lugar o si el Pueblo le pertenecía. Debo reconocer y reconozco en el corto tiempo que la puedes ver, su silueta de mujer bella pero su caminar tan apresurado apenas te deja un instante para contemplarla. Sin embargo, su rígido rostro serio, te hace imaginar que puede ejercer de Juez, de Jefa de Prisiones ó Comandante en Jefe de las Fuerzas Especiales u otro oficio de alto rango de Mando y para sorpresa mía, todo eso está muy lejos de su realidad. Y esto me hace reflexionar, cuando como equivocados humanos, emitimos un criterio sobre una persona que no conocemos y muchas veces, sobre quien ni tan siquiera hemos escuchado el sonido de su voz y fue esto lo que me pasó con "ella".¡¡¡ Jamás de los jamases ....!!! pudo mi pobre mente imaginar que pudiera cruzarme algún día, una sola palabra con "ella" y desde luego lo que sí tenía claro es que " nunca me acompañaría a comer en mi mesa...". Todos los días, entraba en la cafetería con "su helado aire", buscando la prensa mientras saboreaba su café con leche mañanero. Un día, yo ... muy temeroso, le ofrecí la prensa que sabía, leía "ella" y me la aceptó. Nada más pasó ni debía pasar pero a partir de ese día, trataba de reservar la prensa para cuando ella llegara y comencé a descubrir otro rostro, sin aquel protector hielo, incluso una tenua pero bella sonrisa. Aquel viento helado, dió paso a un caluroso viento manso, como el que en pleno verano entra por nuestra Ría y comencé a preguntarme si me había equivocado sobre lo que de ella me había imaginado ... ¿ Sería acaso que usaba ese frío viento como una protección hacía los que ella no dejaba verla...? Era como si el viento helado se hubiese esfumado del aire.
Pasaron los días y fuera del embrujo de la Cafetería ENZIANI, al verla pasar, seguía siendo aquella persona siempre apurada en la cual nunca sabías si iba o venía, porque las prisas eran siempre las mismas en cualquier dirección con su paso que podría llamarle " la antesala de echar a correr", pero algo había cambiado en mi criterio...., porque ahora, ya le había visto su manso y bello rostro del saludo mañanero. Y llegó el inesperado e inimaginable día y también porque ocultarlo, el día que "ella", me hizo feliz.. Ese día, cuando pretendía pagarle al camarero, este me indicó que "ella" me había invitado a mi café...¡¡¡ ¿ a mí .... "ella"...? ¡¡¡ casi me caigo al suelo de la sorpresa....!!! ¡¡¡ jamás... nadie que no conociera y aún siendo mujer conocida.... me había invitado a un café y sin embargo aquel ser, que yo siempre imaginé de hielo, me permitía conocer a la mujer que tras el mismo se ocultaba... y debo reconocer ...¡¡¡¡ que me gustó ...!!!. Desde aquel momento, cuando la veo pasar, ¡¡¡ eso sí... apresurada...!!! sé que aparte de ver una bella mujer apurada, veo la dulce sonrisa que esconde en su interior, la cual me hace convencer que debe ser un bello ser humano. Nunca más he vuelto a sentir el helado viento en su caminar....." simplemente ... que tiene prisa...."" y por todo ello, quiero dedicar esta reflexión a todas las personas que como yo, aveces creemos y emitimos un criterio sobre otras personas sin conocerlas y al mismo tiempo, quiero que "ella"¡¡¡ TÚ...!!! me disculpes por estar tan equivocado durante tanto tiempo. No tengo ni debo tener más que su frágil pero dulce saludo mañanero y así debe ser, pero no por ello, dejo de sentir la felicidad de descubrir " entre el aparente hielo", la cálida y dulce sonrisa de una mujer y es que tal vez, los hombres solo sabremos de una mujer ..." lo que ella nos permita saber...".
¿ Será todo esto fruto del extraordinario café que tomamos en la cafetería ENZIANI...? sea lo que sea...me enseñaste a que JAMÁS se debe juzgar a nadie.... sin conocerla y así, procuraré hacerlo a partir de ahora. Gracias por tu saludo y por esa bella sonrisa de mujer que me dejas ver.
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